sábado, 20 de octubre de 2007

Good day sunshine


Club de golf, club de voley y ahora club de karate. El profe es un señor de 75 años, y fundó hace 50 años la rama de karate de la universidad. Ha estado impartiendo clases desde entonces. A pesar de que el estilo es distinto al que practicábamos en la escuela (este es shotokan), el principio es el mismo. El próximo fin de semana tenemos un campeonato, y parece que va a estar simpático: es un todos contra todos. O sea, por sorteo me puede tocar combatir contra un 4o dan de 140 kilos, o contra un cinturón blanco como yo xD jajajaja. Todo sea por la experiencia. Y me toca hacer rompimiento frente a la universidad: todos los novatos que ingresan a la rama tienen que romper una tabla de poco menos de una pulgada en el festival de ICU. Eeen fin.

El fin de semana pasado fuimos a comer pez globo al fin! Recuerdo muy bien que cuando tenía 7 u 8 años vi en una revista un reportaje sobre la cantidad de personas que habían muerto por haber comido Fugu mal preparado, y desde entonces me llamó la atención. Y la sorpresa fue muy grata: el pez globo es un plato fino sorpresivamente sabroso. E inesperadamente bien aprovechado. Lo bueno fue que junto a nostros fue Koshiro, un estudiante japonés del dormitorio cuyo padre tiene licencia para preparar fugu, por lo que nos ilustró en el arte de comer este pescado tan famoso.



Partiendo por el sashimi de Fugu (filetes de pescado cortados en trozos muy finos), hay que comerlos uno a uno (por ningún motivo dos al mismo tiempo), sumergiéndolos en la salsa de soya aliñada con cítricos, para resaltar aún más el sabor del bocado. La textura es más suave que la del salmón, y el sabor un poco más metálico e intenso que el atún.



Del pescado se aprovecha lo más posible, por lo que también sirven sashimi de piel de Fugu. A la izquierda, el pequeño pocillo tiene jirones de piel. Son un poco más fuertes que el sashimi de la carne y un tanto más chiclosos, pero el sabor sigue siendo muy bueno. No es una textura a la que esté muy acostumbrado, pero fue interesante sentir el sabor. Nos sirvieron también un vaso con sake caliente con la aleta de Fugu dentro, como se hace tradicionalmente. Esto impregna el alcohol de un sabor muy potente, mucho más espirituoso que el sake común y corriente. Pero hay que tomarlo mientras está caliente, una vez que se enfría no es tan rico >.<



Todo listo para la comilona. Y la cesta que se ve es donde freímos partes del pez a modo de fondue. Increíblemente, el Nado (el nombre de la cesta) está hecho puramente de papel. Y está colocado sobre una cocinilla eléctrica, y uno regula la temperatura desde el control que está en la mesa.


Las partes que había que cocinar en el fondue. Las que están en la orilla de la derecha del plato eran las más sabrosas, y las más codiciadas por los amantes del fugu: tienen piel del pescado adosada. En el plato del fondo, hay tiras más contundentes de piel que hay que cocinar por precaución. Además, había champiñones, tofu y verduras varias para meter al agua hirviendo y acompañar al pobre pez globo.



Y todo listo! A meter los palillos en el menjunje de verduras y luchar por los pedazos de carne. Los pedazos más contundentes de pescado tenían huesos grandes, y las espinas eran grandes y estaban pegadas a éstos. Por lo que se podía perfectamente coger el pedazo con ambas manos y comer hasta el último capilar de Fugu. No se puede desperdiciar nada!



Sumergiendo uno de los pedazos en la salsa. La carne cocinada es muy tierna, mucho más que el congrio o la corvina a la plancha. Es más consistente que la carne de pescado tradicional, que tiende a deshacerse en pedazos pequeños. Curiosamente, los ideogramas que componen la palabra Fugu literalmente significan "cerdo de agua".



Así más o menos se veía el estofado.


Yo comiendo la parte más rica del pescado. No lo encontré particularmente distinto a las otras partes, pero parece que los japoneses realmente se vuelven locos cuando toca comer esta parte. Al menos Koshiro estaba entero cocoroco...




Pasando a otros temas, tengo que subir esta foto. Es simplemente notable. Efectivamente, la señora tiene el pelo morado. Sólo en japón xD



Como paseo de curso, la profesora nos llevó al museo Ghibli. Este estudio, a manos del gran creador Hayao Miyazaki, se ha encargado de mantener viva la magia en el mundo del animé por más de 20 años. Si no han visto ninguna película de ellos, les recomiendo totalmente títulos como "porco rosso" (la dieron por mucho tiempo en hbo), "tonari no totoro", "spirited away" -que por cierto ganó oscar a mejor película animada hace unos años-. Padrino: creo que todavía la película de totoro que te presté está en tu casa xD jajajaja. Algún día la recuperaré, algún día...


No se pueden tomar fotos dentro del museo lamentablemente. Había muchas cosas interesantes, entre las cuales había un "nekobus" enorme donde los niños podían jugar (era peludo y todo, muy simpático), y lo que particularmente me sorprendió fue una suerte de kinetoscopio de totoro.. Sí, kinetoscopio, como los que inventó Edison y sentaron las bases para la animación moderna. Simplemente increíble, en vivo y en directo se veía como si fuesen dibujos animados inmersos en la realidad. No pude filmar, pero encontré un video en youtube de una persona X donde sí se ve de qué estoy hablando.



Y, como no podía faltar, la clásica foto del museo ghibli con el robot de "castle in the sky". Otra película muy buena que recomiendo totalmente.


Por otro lado, la obra de teatro salió muy bien. Incluso, el personaje principal ganó premio al mejor actor (al final, a pesar de ser el protagonista de la serie en la que estaba basada la obra, me tocó un papel secundario -menos mal :P-). La gente se rió mucho, y por fin pude afeitarme esa condenada barba que tanto me molestaba. Pequeños sacrificios que hay que hacer en el mundo del espectáculo. Además, aproveché de cortarme el pelo yo solito. Y no quedó tan mal! Me hizo ganar más de un "ooooh" de admiración de parte de mis compañeras, que no me quisieron creer en un comienzo que yo me lo corté. Obvio que lo iba a hacer, si el peluquero más barato que hay acá sale como 10 lucas :S.





Pequeño fragmento de la obra.



Voy a intentar actualizar esto más a menudo. Esta semana que pasó fue simplemente imposible, ensayamos todos los días hasta la 1 ó 2 de la mañana, y al día siguiente a las 8 clases. Uf!

2 comentarios:

noesmasqueblabla dijo...

Jiajiajia... Bruno, por favor no mueras de comer tanto de ese pescado.

Y por cierto, las flores me las mandó un chiquillo...

Juano dijo...

Me encanta todo esto de la crónica culinaria! El pescado lo freían en agua? Ya podríamos aprender de eso por acá...
De la obra no entendí nada, pero por las risas se nota que la gente disfruta! Debes de ser el primer chileno que triunfa sobre los escenarios japoneses, si descontamos a la geisha chilena claro está, que los escenarios de ella eran probablemente muy distintos...